Desde el principio de los tiempos se conoce el uso de las plantas para uso medicinal, para la curación de diversas enfermedades. Incluso desde antes que Aristóteles y Plinius escribieran sobre ellas, ya en la Biblia se las mencionaba, diciendo que el Creador había dado “la hierba para el servicio del hombre” (Salmo 104:14). Desde la antigüedad, sacerdotes y monjes se encargaron de llevar al conocimiento de la gente, los métodos de curación por medio de las plantas. Es por eso que la Fitoterapia (curación por el empleo de las plantas) se practicó desde el período de los egipcios, y de seguro esta es una ciencia tan antigua como el origen del mundo. El “Papiro de Ebers” es por cierto el texto más antiguo en el cual se mencionan las diferentes hierbas, utilizadas como medicina. Y es así como junto al imperio romano florecieron, los practicantes de esta ciencia más mencionados como: Plinio, Catón, Virgilio y otros muchos más grandes de la antigüedad. Abundando un poco más en esto; en la China, se conocía un escrito del emperador Chin Nung (1600 A.C.) que había clasificado más de 360 plantas.
Con el discurrir de la historia hubieron reyes, emperadores, que dieron instrucciones especiales para el cultivo de algunas planta medicinales, entre ellos podemos nombrar a Carlo Magno (742-814) quien ordenaba cultivar jardines con hierbas medicinales, cuando erigía una nueva ciudad. Como podemos ver el uso de las plantas medicinales es tan antigua como los tiempos y, ya por los nuestros dejó de ser un conocimiento empírico, para convertirse en una verdadera ciencia al servicio de la humanidad. Con la sencillez que nos caracteriza y con la intención de hacer del conocimiento de las cualidades curativas de las plantas ponemos a la consideración de ustedes hoy; vamos a hablar de una de las más conocidas y, de uso universal en las artes culinarias por un lado y de su uso medicinal por el otro: El tomillo.
TOMILLO
(Thymus vulgaris L.)
Otros nombres: Serpol, Tomillo Silvestre, Tomello. Familia: Labiadas
Características Generales: Su apariencia física es de un arbusto que generalmente no supera los 30cm., de altura. Sus hojas pequeñas, lineales, aunque variadas en su forma, naciendo en las zonas bajas del tallo y en las más altas. Sus flores están reunidas en formación similar a las espigas. Es de crecimiento espontaneo en las regiones marinas y montañosas. Para su empleo terapéutico se usa la parte florida, recogida en la primavera avanzada o en los días iniciales de verano.
Principios Activos: La planta toda contiene un aceite volátil, formado por derivados fenólicos como el timol, carvacrol, canfeno, linalol, tricicleno, borneol, terpinemo, limoneno, mirceno, cineol y otros constituyentes volátiles. Además de flavonas, algunos azúcares, ciertas resinas, taninos y saponinas.
Empleo Terapéutico: Esta planta debe sus cualidades terapéuticas a la composición de su aceite esencial, por su contenido abundante en fenoles y terpenos, las mismas son: antisépticas, digestivas, expectorantes y febrífugas. En el pasado ya era apreciada por sus propiedades curativas, que hoy día ha sido confirmada por la ciencia moderna. Se ha estudiado el efecto que esta hierba ejerce sobre la secreción biliar, encontrándose que un cocimiento al 5% de droga seca, determinaba un aumento del 200% a 300% de fluidez en la bilis. Tal acción es producida por el ácido cafeíco y clorogénico presente en la planta. Es por demás interesante las observaciones referentes a la actividad antihelmíntica (parásitos y gusanos intestinales) habiéndose hallado una eficacia considerable de la esencia del tomillo contra el Ascaris Suum Goeze y otros parásitos.
Sin embargo el exceso de la dosis requerida para producir el efecto terapéutico, conlleva un riesgo. Por lo que su uso no se practica comúnmente. Quizás la actividad más importante del Tomillo es la antibiótica de tipo bacteriostático, Risler ha ensayado con la esencia de Tomillo y de otras plantas, valorando la duración de la acción bacteriostática sobre colonias de microorganismos (estafilococos). El aceite esencial del Tomillo, inhibe el crecimiento de las bacterias en cuestión por 28 días, mientras que si se usa asociada con la esencia de alcanfor o trementina, su acción desinfectante se prolonga. Los vapores de tomillo pueden utilizarse para esterilizar el aire.
Indicaciones y contraindicaciones:
Estudios realizados por dos eminentes científicos: Hettche y Rosenthal demostraron una acción antibiótica muy marcada especialmente sobre las bacterias Gram Positivas, sobre el microbio de la difteria, estafilococos y E. Coli. En lo referido a la actividad contra los hongos (micosis), es discreta. Myers aconseja la esencia de Tomillo para uso local, contra la Actinomicosis, Blastomicosis y Moniliasis. También aumenta la secreción bronquial y fluidifica el mucus del aparato respiratorio, efectuando al mismo tiempo una acción desinfectante. En los casos de bronquitis, faringitis, traqueítis y bronco neumonías.
La esencia de Tomillo dada su elevada liposolubilidad, penetra rápidamente a través de la piel y efectúa una acción desinfectante sobre los tejidos subcutáneos. Gracias a esta propiedad se puede obtener una buena actividad antibiótica para uso local, en todos los casos de infección; forunculosis, eczemas, abscesos, acné, y flemones, así como desinfectante de la piel antes de la incisión quirúrgica. Su aplicación en forma de tópicos y gárgaras tiene buenos resultados en bronquitis, traqueítis, faringitis, amigdalitis. Se puede utilizar en casos de infecciones del aparato digestivo, sostenidas por gérmenes sensibles a la acción del Tomillo, diarreas infecciosas, otras patologías.
También es útil en la desinfección de objetos o heridas quirúrgicas, sirve también asociado a otras plantas, como estimulante de la secreción ácida gástrica y para aumentar el drenaje de bilis (digestión lenta). Es de la mayor importancia decir que algunas personas pueden ser alérgicas al Tomillo y a sus preparados y que el uso cutáneo puede presentar irritaciones, en otras personas puede presentar alergias a nivel de cutis, incluso reacciones inflamatorias. Evitar su administración a los que sufren úlcera gástrica. El envenenamiento se puede producir por dosis inadecuadas o desproporcionadas de aceite esencial y, se manifiesta con vómito, nauseas, astenia, lesiones renales, bradicardia y depresión cardiaca.
No debe administrarse dosis terapéuticas ni aceites de Tomillo en mujeres en estado de gravidez, porque es un poderoso estimulante uterino.
Dosis y Modalidad de uso: Uso Interno:
Cocimiento: hervir durante tres minutos 2 cucharadas de hojas en dos tazas de agua. Tapar, dejar reposar cinco minutos y colar. Tomar un pocillo después de cada comida y otras antes de acostarse. Utilizar en casos de digestión lenta y difícil, elimina gases. Trastornos respiratorios y estados febriles.
Para bajar la fiebre y lograr que el enfermo transpire. Aceite esencial: tres a cuatro gotas 2 a 3 veces al día o dos o tres gotas en aerosol, dos veces por día (en dos ml., de agua), la esencia se puede utilizar para fumigaciones
Uso externo:
Cocimiento: Se utiliza el mismo cocimiento indicado para uso interno. Se aplica en lavados vaginales, para eliminar la leucorrea o flujo blanco. También en gargarismos, con desinfectante de la boca y la garganta, combatir el mal aliento y evitar todo tipo de infecciones bucales.
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