ESTREÑIMIENTO:
PLANTAS MEDICINALES
Uno de los remedios clásicos contra el estreñimiento
son; las semillas de lino, en ellas se encuentra una gran cantidad de fibra
dietética y sustancias que en pequeñas cantidades estimulan el movimiento
intestinal. Su forma de uso; para tomarlas se pone dos o tres cucharaditas de
semillas de lino en agua y se dejarán en remojo toda la noche, por la mañana,
se tomarán las semillas y el agua en que se han remojado.
Si se producen muchas flatulencias, se pueden
cambiar las semillas de lino por las de zaragatona (plantago ovata), mucho más pequeñas. Entre el salvado y los
laxantes formadores de masa, y los laxantes más potentes, contamos el grupo de
la Isphagula que son semillas de
diversas plantas de la familia del llantén (Plantago
psillium, plantago ovata, etc). Se trata de semillas muy pequeñas que se
encuentran en los comercios ya trituradas y en forma de granulado, y que
también se toman con agua.
Son
notablemente populares y de gran utilidad en el tratamiento del estreñimiento a
largo plazo. Existen sin embargo, otro tipo de laxantes de una potencia mayor,
y poco recomendados para usarlos de forma recurrente, aunque son los que más se
usan en realidad, son los laxantes osmóticos y su acción consiste en irritar
moderadamente la mucosa intestinal, para que el intestino reaccione segregando
una buena cantidad de jugos intestinales que, fluidificarán las heces. Algunos
son muy potentes y otros menos y claro siempre será preferible empezar por los
más suaves.
Una serie de géneros de plantas se usan en este
sentido como; el género Rhamnus; del
primero se utilizan especialmente los frutos y del segundo las cortezas. En el
caso de los laxantes, es mejor utilizar una planta recogida de algún tiempo que
una excesivamente fresca, ya que; las recogidas recién son extremadamente
purgantes y van perdiendo potencia conforme se desecan y envejecen.
·
Cañafístula
(Cassia fístula). Su fruto es una caña que al moverla hace
un ruido como una maraca, cuando abrimos la caña nos damos cuenta que contiene
semillas muy duras en su interior y una sustancia dulzona y esponjosa entre
semilla y semilla (que se denomina vulgarmente sello). Estos sellos se pueden
comer y masticar como si de un caramelo se tratara, generalmente masticando
seis o siete cada día es suficiente para aliviar el estreñimiento. El resto de
la caña y la semilla la guardamos para hacer tizanas, hirviendo la planta 5
minutos y dejando reposar otros 5 para luego tomarla.
·
Cáscara
sagrada (Rhamnus purshiana). Se puede adquirir en
farmacias y tiendas de dietética, comúnmente en forma de comprimidos o de
capsulas. De las plantas del género Rhamnus es una de las más utilizadas. Hay
otros tipos que se acostumbra utilizar para tratar el estreñimiento como el
aladierno (Rhamnus cathartica). Sin embargo, su uso ha de
hacerse con suma precaución por tener efectos purgantes muy acentuados. Las
plantas del género Rhamnus deben
utilizarse con mucho cuidado porque; se ha observado que la pared intestinal de
las personas que toman estos productos con frecuencia terminan tomando una
coloración muy oscura, casi negra. Pero, aún
no se ha comprobado que esta pigmentación tenga efectos nocivos, pero de
hecho existe una duda.
·
Sen
(Cassia senna). Se puede utilizar tanto las hojas como
sus frutos alados, denominados también sellos. Se trata de un laxante más
potente que el anterior, que se toma poniendo 5 hojas o frutos por taza, e
hirviéndolos de la misma manera que en el caso de la cañafístula.
Los hábitos de vida son de especial importancia en
el estreñimiento. El primero de ellos consiste en proceder hacer tu necesidad,
siempre que se sienta que tu cuerpo está dispuesto a ello. Las circunstancias
sociales hacen que a menudo no vayamos a defecar cuando realmente tengamos ganas,
sino cuando podemos o lo consideramos aceptable. Por esto, lo mejor es adoptar
una rutina, como por ejemplo ir al lavabo todas las mañanas o todas las noches
a una hora determinada, aunque no tengamos demasiadas ganas.