sábado, 23 de marzo de 2013

CÁLCULOS BILIARES

cálculo biliar


Los cálculos biliares o coletiasis se originan por la conformación de concreciones duras en la vesícula biliar y es una de las numerosas enfermedades que se debe a la dieta occidental. Se estiman cálculos, que el 20% de las mujeres y el 8% de los hombres de más de  cuarenta años padece esta enfermedad, de manera que una de cada setecientas personas sufre una intervención quirúrgica por esta causa que no es más que extirpar la vesícula biliar.

Una de las primeras consecuencias de la presencia de los cálculos biliares es la disminución del fluido biliar lo que supone además una menor digestibilidad de grasas y proteínas. La formación de cálculos biliares está estrechamente relacionada con la composición de la bilis, de forma que una bilis espesa tendrá más posibilidades de formar piedras que una de consistencia más fluida. Sin embargo esta aparente fluidez, no tiene tanto que ver con su apariencia, más o menos líquida, sino; con el contenido porcentual de colesterol que posea.

Mientras más cantidad de colesterol contenga la bilis, existe mayor posibilidad de formar concreciones. La bilis está compuesta por tres productos principales; colesterol (entre 5 y 50%), sales biliares (50-90%) y lecitina (5-25%), que es también conocida como; fosfatidilcolina. El colesterol es poco soluble y tiende a aglomerarse, mientras que los ácidos biliares y la lecitina aumentan la solubilidad del colesterol y con esto previenen la formación de cálculos biliares.
piedras en la besícula
 
Los cálculos biliares son; de cuatro tipos básicos; los de colesterol puro, los de bilirrubinato de calcio (un pigmento), los de tipo mixto (compuestos de colesterol, ácidos biliares, pigmentos, sales de calcio, etc.), que son con diferencia los más frecuentes (80%), y los compuestos enteramente por minerales (casi un 20%).

¿Es conveniente extirpar la vesícula?

Se calcula que una de cada mil personas ha sufrido una colecistectomía (extirpación de la vesícula) a causa de la presencia de cálculos biliares. Se trata de una operación frecuente en muchos centros de cirugía de emergencias, si bien cada vez se practica menos desde la aplicación de ultrasonidos que pueden llegar a fragmentar los cálculos biliares en trozos más reducidos para expulsarlos con más facilidad.

¿Tienen tratamiento?

El tratamiento de los cálculos biliares es largo y siempre da un resultado positivo, pues se calcula que la tasa de éxito está en aproximadamente 50%. Existe mucha polémica sobre si los medicamentos son realmente eficaces en la disolución de los cálculos. No existen plantas o remedios sintéticos maravillosos a este afecto, realmente hay que tener en cuenta que la disolución, en caso de producirse, es muy lenta.
En cualquier tratamiento no se observan disminuciones notables del tamaño de las piedras, hasta pasado uno o dos años.

Si se consigue aumentar el porcentaje de ácidos biliares en la bilis es posible inducir una reducción del diámetro de los cálculos. Por ello se ha propuesto el uso de ácidos biliares como él; quenodeoxicólico o el ursodeoxicólico para este fin. Una dieta racional puede hacer que estos ácidos biliares aumenten  en la bilis. Hay que reducir el consumo de grasas animales e incrementar la ingesta de fibras vegetales, como por ejemplo la pectina (presente en muchas frutas), sobre todo en la piel.